Sobre la conspiración contra el Pueblo

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Tomada de internet, representación de la guerra judicial

 

La Dirección Nacional del Movimiento Guevarista aclara que no ha emitido ningún documento conjunto con organizaciones y partidos de izquierda.

Asimismo, debemos denunciar que en Bolivia se está llevando a cabo un proceso de judicialización de la política (lawfare), instrumentalizando la justicia para perseguir y descabezar al movimiento indígena-originario-campesino, obrero y popular aglutinado en el MAS, en la desesperación gubernamental de no poder contener la indignación de las bases, de no querer validar la voluntad política popular y de ser sobrepasados por la movilización del pueblo.

El gobierno hoy nos impone la narrativa de la derecha, que la oligarquía, el empresariado, los medios de comunicación funcionales y los partidos políticos tradicionales aplauden, la reorganización de la derecha en Bolivia tiene en Luis Arce a su principal colaborador y promotor, que vacía del contenido político y clasista la lucha y los logros del pueblo, recurriendo a imaginarios anti campesinos, anti sindicales, patriarcales y anti revolucionarios.

Así, la acción gubernamental contra la dirigencia y militancia del MAS se expresa en el encarcelamiento extralegal de la protesta de mujeres militantes, en la constitución de organizaciones paralelas hasta la implementación espuria de un congreso del MAS, en la condonación de procesos judiciales a la derecha golpista, en la denuncia, persecución y despido de funcionarios públicos acusados de “evistas”, en los continuos intentos de militarización del Chapare, en la movilización de grupos de choque fascistas junto a efectivos policiales para la represión de la movilización popular, y por último en las denuncias contra Evo Morales.

Los rumores y acusaciones contra Evo Morales no son novedad, pero el paso a la judicialización sorprende más cuando quienes en el pasado asumieron una defensa recalcitrante y férrea de Evo, hoy se convierten en los acusadores. No olvidamos que la última involucrada en las acusaciones militaba exactamente en la misma organización del actual ministro de gobierno. Pero el fin es otro, pues pese a que lamentablemente las mujeres en Bolivia sufren todos los días el acoso y violencia de una sociedad patriarcal y machista, esto poco o nada les importa, la motivación de este proceso es el lawfare.

Para nosotros queda claro que debe combatirse al patriarcado y el machismo, y particularmente que deben ser castigados quienes hayan cometido un crimen, en un debido proceso judicial, mientras que en lo social debemos aunar esfuerzos conscientes porque el lastre machista y patriarcal deba eliminarse.

El gobierno de Luis Arce instrumentaliza la lucha, de los movimientos sociales, que a pesar de la resistencia activa de las bases y dirigencias orgánicas a los intentos de cooptación de las organizaciones que conforman el pacto de unidad, el gobierno se embandera de dirigencias compradas, legitimadas en el poder gubernamental. En el proceso contra Evo instrumentalizan la lucha de las mujeres contra la violencia para confrontarlas con intereses políticos, donde organizaciones y activistas progresistas se suman, como en el 2019 contra Evo y contra el Proceso de Cambio.

Ha sido una gran limitación que el proceso no haya superado el caudillismo y como izquierda no pudimos cambiar esta relación para profundizar el proceso, y la derecha lo sabe. Hoy, las organizaciones y movimientos sociales siguen aglutinados junto a Evo, y esta es la realidad, negar su liderazgo histórico no superará las limitaciones.

En las previas al golpe de estado del 2019, facciones de la izquierda se congregaron, razonando que los límites, derroteros y errores del gobierno de Evo Morales, serian superados al constituir un nuevo instrumento político, un partido que hiciera a un lado al MAS IPSP. Conspiraron entonces y fracasaron, y frente al golpe huyeron, se limitaron al panfleto desde la comodidad del exilio o de sus sofás. Con la recuperación de la democracia rodearon a Luis Arce y conformaron su gabinete como asesores, tácticos y operadores, y volvió la conspiración.

Esta línea (de arcistas, choquehuanquistas y otros istas) es hoy la contra revolución, ya que en lo político están destruyendo al sujeto revolucionario que levantó y lucho estos años, y en lo económico desmontan las políticas e iniciativas del Proceso de Cambio que fueron conquistas contra el neoliberalismo. Son la izquierda clase mediera (pequeño burguesa) qué se siente superior al pueblo y con derecho a gobernarlo, su revanchismo no mira al enemigo latifundista, al oligarca, al feudal, al empresario qamiri, su revanchismo se estrella contra la dirigencia obrera y campesina originaria, indígena.

Quieren confundir a la opinión pública con pronunciamientos apócrifos y faccionales, pero que no se equivoquen, los comunistas y guevaristas estamos donde siempre, al pie del cañón, en las calles, junto al pueblo, organizando y marchando, haciendo lo de siempre, trabajar y luchar con la bandera del Che y la revolución en lo alto.

 

¡¡¡La lucha es junto y para el Pueblo…!!!

¡¡¡Victoria o Muerte!!!

Dirección Nacional

Movimiento Guevarista

Bolivia, 7 de octubre 2024

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